Cuando tu quieras (Ven Como Eres)

Sigue a tres hombres con discapacidades mientras hacen un viaje por carretera de Colorado a Montreal para perder sus virginidades en un burdel que sirve exclusivamente a una clientela con necesidades especiales.

Inspirada en hechos reales y escrita por Erik Linthorst, este delicioso y mejorado remake de la película belga de 2011 «Hasta la vista» se compromete con las necesidades sexuales no satisfechas de la comunidad de discapacitados con honestidad, evitando cuidadosamente un lente de lástima y de culpa sin cuerpo.

En cambio, «Cuando tu quieras (Come As You Are)» cuenta su historia a través de la empatía, la compasión y lo que se siente como un atractivo humor interno.

Si bien es cierto que es una película que da poder y libera en general (y nunca es superficialmente inspiradora, como a menudo pueden serlo las películas sobre personas discapacitadas), «Cuando tu quieras (Come As You Are)» viene con una importante salvedad: los tres actores de aquí son capaces de desenvolverse en la vida real.

En este sentido, la película parece una oportunidad perdida de inclusión en momentos en que otros filmes independientes como «Give Me Liberty» han avanzado recientemente en la representación en pantalla de actores con discapacidades.

Tres jóvenes discapacitados huyen de sus padres

Aún así, hay mucho que tener en cuenta dentro del punto de vista interseccional y la dinámica racial de la película de Wong, que pretende ver la poderosa sexualidad de aquellos a los que el mundo indiferente que nos rodea insiste en desexualizar.

Es una noción magníficamente articulada en «Crip Camp», el próximo documental de los cineastas James Lebrecht y Nicole Newnham sobre la longevidad de un campamento de verano de los 60 para adolescentes con discapacidades. «La gente no te ve como un hombre o una mujer; te ven como una persona asexual», reflexiona un personaje. A su modesta manera, «Cuando tu quieras (Come As You Are)» se propone corregir esta óptica despistada y sin cuerpo.

La primera persona que encontramos en el trío mencionado es Scotty (Grant Rosenmeyer, con una excelente sincronización cómica), un apasionado pero insatisfecho rapero parapléjico desde el nacimiento, que vive con su preocupada madre Liz.